viernes, 17 de agosto de 2012

la emoción de ser ubetense

El Puente Ariza vuelve a ver la luz sin agua

Aun recuerdo la primera vez que yendo hacia Navas de San Juan por la carretera antigua mi padre tuvo que detener el coche para que un joven ubetense mareado por las curvas tuviera que pararse por causas naturales.



Una nueva carretera ahorró parte de ese malestar y ahora en lugar de pasar por encima de una de las grandes joyas de la cantería circundaba mas directa y esquivando el Guadalimar para así poder facilitar la construcción del embalse.

Como cada año mis padres y yo acudíamos a ver a la Estrella en su romería y en lugar de pasar por él cosa que en mi memoria y en mi recuerdo todavía queda se escuchó a mi padre decir ¡Manuel mira el Puente Ariza! y yo ilusionado lo contemplé y desde entonces esa imagen bañada por la luz del día vista desde la carretera junto con las palabras de mi padre diciéndome "te acuerdas que antes pasábamos por ahí"  fueron las única imágenes del puente que pude ver.



A raíz de convertirme en historiador y ejercer como guía cultural y tener ese gusanillo otorgado por mi gran amor al pasado y a los monumentos antiguos empecé a investigar sobre el puente tras conocer la historia de como las aguas de un embalse lo sumergieron y del que solo dejaron visible la punta superior. Supe que hubo proyectos de traslado del mismo barajándose la posibilidad de llevarlo incluso al parque norte de la ciudad de Úbeda, para salvarlo, hubo movilizaciones e incluso se liberó dinero para llevar a cabo el traslado pero finalmente el agua hizo su función y la desidia y el abandono lo sumergieron llegando a tener unos catorce metros de agua el embalse a la altura del puente para cubrirlo.



La bajada de las lluvias en el estío ha proporcionado que una vez mas podamos ver este monumento y deleitarnos con este fantástico paraje de olivar y río a la orilla del Guadalimar que hizo que mis pasos me llevaran el otro día ante la mítica construcción de Vandelvira y a recorrerla tal cual hacía de niño en el coche de mi padre y que tan buenos recuerdos me trae, eso me hizo revivir grandes momentos de mi infancia y sin duda valorar de forma mas especial un patrimonio del que he hecho uso y con el que estoy comprometido.



¿Qué debemos hacer con el puente? pues siendo sinceros creo que Vandelvira lo diseñó para cruzar por ahí, lo diseño para saltar las aguas del Guadalimar y lo hizo para ese lugar. El agua disolvente universal puede destruirlo, entonces quizás la solución sea trasladarlo pero también nos invita a que este lugar aprovechando la bajada de las aguas del estío nos sirva para preservarlo más y trabajar para que la acción de la inundación desaparezca y así conservarlo por siempre , pues indudablemente esta joya es uno de los tesoros de nuestra historia.


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